ENTREVISTA CON FEDERICO CANTERA, PRODUCTOR Y ACTIVISTA
“Nos ponemos a la orden, tenemos información extraída de Dinama [la Dirección Nacional de Medio Ambiente] para los vecinos. Es información totalmente veraz la que tiene el Ministerio de Medio Ambiente sobre los impactos que habrá en la zona por el pasaje del tren para UPM. Realmente estamos muy preocupados como vecinos de aquella zona que ya pasamos por todo esto, por lo que es un megaproyecto. Al no escuchar a veces la voluntad de los vecinos, aparecen estos proyectos que pasan por arriba de los pueblos y de su gente. Estamos a la orden con información y la experiencia de todo eso”, expresa en diálogo con El Acontecer.
Junto con el colectivo de vecinos que lo rodea en sus campos y predios, emprendieron la lucha en su momento para obligar el retiro de Aratirí. Luego de ingentes esfuerzos, debates, pleitos, juicios, triunfó la voluntad popular. Fue —lo que se podría decir— el final feliz de la zona.
“Un final en el sentido de que lo que nosotros decíamos al final tenía razón. Era un proyecto que no era rentable y que no se iba a llevar a cabo. Fueron años muy difíciles, de mucha división entre los vecinos de la zona. Un proceso complicado, donde se dio lo que veníamos diciendo aquellos que estábamos en contra, que era un proyecto inviable y que existían otras motivaciones detrás. Realmente teníamos razón, a eso se concluyó”, indica.
Según Cantera en aquel momento la sociedad se agrupó y hubo cohesión sobre todo en los vecinos empoderados de su territorio, de sus derechos, de permanencia a toda una zona, a proyectos productivos.
“No puede ser que mañana venga un proyecto y pase por arriba de todo eso. Nos decían que no podíamos hacer nada, que no tenía vuelta y que estaba todo el pescado vendido. Los vecinos nos juntamos y no tuvimos más remedio que defendernos porque el Estado prácticamente que nos entregó a las garras de la empresa Aratirí, donde no funcionaban las instancias como debían ser. Por ejemplo, los procedimientos para entrar a los campos estuvieron todos mal hechos y fueron muchos años de lucha, donde terminamos triunfando en el Tribunal de lo Contencioso Administrativo. Allí tuvimos la ayuda de abogados constitucionalistas, y con toda esa experiencia venimos a ponerla al servicio de los vecinos de la zona, la misma preocupación que tuvimos nosotros entonces”, explica.
Cantera y otros productores de Cerro Chato se acercaron al colectivo “Por el costado de la vía” de la zona de Colón, Peñarol y Sayago (Montevideo) y en forma continua se debate, se producen y concretan charlas informativas, se participa en grupos de redes sociales. En definitiva, se informa.
“UPM y Aratirí es la misma lucha pero da la sensación que esto es más grande que aquello. UPM es una empresa, a pesar de que en lo particular soy contrario al proyecto, seria. Todo lo contrario a Aratirí, que era una empresa trucha, que se había hecho realmente para ese proyecto. Entonces tiene sus similitudes y sus diferencias, pero creemos que, en todos estos casos de megaproyectos, la ciudadanía tiene que expresar su voluntad y la misma deberá ser respetada. Acá no estamos llegando a un lugar donde se puede pasar por arriba de la gente, de los pueblos”. En esa línea manifestó su intención de volver a la región con algunas charlas informativas, “porque todos los días estamos recibiendo información y debemos ponerla a la orden de los vecinos. Acá lo importante es que la gente tenga esa información, acceda a ella y sepa a que atenerse para tomar su decisión. Pero hasta ahora de parte del Ministerio no se ha dado información, solamente grandes generalidades. Eso no es justo, porque sin información la gente no puede tomar decisiones. Entonces lo nuestro es simplemente acercar la información y que la gente decida”, puntualiza Cantera.