El enojo de un intendente uruguayo, Sergio Botana de Cerro Largo con las autoridades nacionales delata desde otro ángulo la desesperación del gobierno frenteamplista de Tabaré Vázquez en complacer hasta la humillación todos los mínimos requisitos que impone UPM (BOTNIA) a su gobierno para instalar la tercera megapastera en su país con tal de maquillar los últimos años de su gestión con la actividad circunstancial generada por la instalación de la nefasta planta.

FUENTE: elobserv ador.com.uy

El intendente de Cerro Largo dijo que primaron los intereses de UPM y no la descentralización

 

 

¿Qué piensa de la instalación de la nueva planta de UPM? ¿Era lo que esperaba?

No. Estábamos esperando participar de la decisión como región poniéndonos de acuerdo para desarrollar una zona absolutamente deprimida de Uruguay. Nos parecía que este proyecto abría la posibilidad de desarrollar esa zona, que es un tren que no volverá a pasar en los próximos 20, 30 o 40 años.

¿La decisión los perjudica?

Nos genera incertidumbre acerca de si habrá alguna alternativa para aprovechar este mega proyecto para el desarrollo de esa zona o si nos quieren reservar a nosotros el rol de simples productores de árboles con campos devastados cuando se corta a madera y despoblamiento en las zonas rurales.

Cerro Largo fue el único departamento que quedó fuera (la planta estaría cerca del límite entre Tacuarembó y Durazno). ¿Por qué cree que ocurrió esto?

Ninguno de nosotros estaba pensando exclusivamente en un departamento, sino en que esto podía contribuir a Rivera, Tacuarembó, Durazno, Cerro Largo, Florida y Lavalleja. Me da la sensación de que primó la elección del interés financiero de la empresa y que no hubo ninguna presencia del intento de descentralización. Acá no va haber desarrollo regional, sino un enclave de la empresa.

¿En las reuniones con la empresa, previeron que esto podía ocurrir?

Le pedimos al gobierno y a la empresa la posibilidad de dialogar como región. Individualmente todos se comprometieron a reunirse pero las reuniones nunca terminaron saliendo. De cualquier modo, bienvenido el proyecto al país. Podría haber sido mejor aprovechado, esa es la sensación que me queda.

¿Piensa que ya estaba acordada la ubicación de la nueva planta?

La sensación que me da es que estaba propuesto por la empresa, tengo algunos elementos para

suponerlo. Pero pensaba que el país iba a negociar de modo de generar un impacto regional fuerte.

 

¿Le decepcionó la resolución?

La realidad es que para el este del país no llega ninguna. Ni en las emergencias, ni en las posibilidades de desarrollo, ni en la inversión pública ni en las políticas de frontera… Pero nada podemos esperar que no sea de nosotros mismos.