Las políticas neoliberales extremas impulsadas por el Frente Amplio y los abusos de las empresas neocoloniales que han tomado el control de la economía charrúa ya han dejado de ser indignantes para transformarse en desopilantes.
Hace un año teníamos que soportar los chistes de mal gusto del intendente de Durazno (ROU) Carmelo Vidalín, que se mofaba con sonrisa sobradora de quienes se oponían a la llegada de UPM2 al centro del país. «Crearán miles de puestos de trabajo» aseguraba como si el fuera el gerente de la empresa.
Esta semana publicamos al mismo Vidalín reclamando que las empresas que habían comenzado a construir la nefasta tercera planta celulósica no empleban trabajadores locales.
Pero ahora, un diputado, Germán Cardoso, denunció que Efice, una empresa involucrada en una serie de irregularidades en los últimos meses, le vende el cloro a OSE a 2.000 dólares la tonelada, cuando al mismo tiempo lo comercializa en Brasil a solo 66 dólares.
Para el Frente Amplio se trata de una interrogante que habría que plantearle “al único proveedor que hubo en el país en los últimos tiempos”, rechazando cualquier tipo de irregularidades en el proceso. El presidente de OSE aseguró que se han hecho múltiples esfuerzos para favorecer la apertura de la competencia y mejorar la eficiencia en las compras.
Lo que dio a lugar a que el presidente de OSE – Obras Sanitarias del Estado, Milton Machado, funcionario oficial que depende directamente de la presidencia respondiera que:…
El problema, dijo, es comercial. “Existe un único proveedor, y allí OSE no tiene nada para hacer”, sostuvo. Remarcó que el precio que la empresa vende al exterior es ajeno al organismo.
Como si el Estado no pudiese intervenir para evitar los abusos de posición dominante de estas empresas neocoloniales