Es notable la evolución del pensamiento colectivo cuando se ha perdido la ingenuidad, ese tesoro intangible del que la mayoría de los humanos nos desprendemos sin pensar, sin querer, irreversiblemente y para siempre.

Una vez quitado el velo (lo imagino  rosáceo) que cubre nuestra mente y la hace ver a todos los hombres buenos, los cielos diáfanos y un final para la vida en el que nos espera el cielo donde seremos felices para siempre, ya no se puede volver atrás.

EDUARDO BLASINA: EL PEZ POR LA BOCA MUERE

Entrando en tema: los nuevos propietarios del territorio que originalmente habitaban los charrúas están exultantes, los nativos han superado la prueba de la pérdida del velo rosado sin que se reviertan sus planes coloniales. Ya todos asumen resignados que los saqueadores no pagarán impuestos, que exportarán dentro de los rollizos que envían a sus zonas francas ingentes recursos de agua y fertilidad que inhabilitan a futuro ninguna esperanza de alguna independencia económica; y todo lo demás, de lo que hemos hablado tantas veces pero que no ha sido suficiente para bloquear sus nefastos planes.

Un vocero oficioso de los neocolonialistas, de esos que a lo largo de esta historia se han ido pasando la posta de las ofensivas y mendaces justificaciones de los nuevos dueños de la tierra, publica con su firma un artículo en uno de los principales diarios de la capital de los orientales donde renueva la rendición incondicional  de una clase de nativos especialmente inescrupulosos que no dudan en proclamar obsecuencia para luego poder reclamar una migaja del banquete al que no están invitados los orientales.  Hoy es Blasina, antes fue Faroppa, y en el medio ha quedado una tan larga como ignominiosa lista de mentirosos impúdicos que se han sucedido en el discurso de los adulones a los intereses del saqueo.

Pero esta vez hay novedades en el discurso, primero se ve obligado a hacer una crónica pormenorizada de la creciente oposición al nefasto proyecto de la nueva planta de UPM (BOTNIA), para luego finalizar dando las “razones” que tiene para discursear ‘si’ en los foros a los que llegue.  Y estas razones son tan pobres que en realidad desnudan la miseria de los defensores de la ‘3ª. Planta’ y confirman por el absurdo las razones de quienes quieren frenarlas.

Veamos:…”en definitiva son finlandeses y hay que pedirles que traten a nuestros productores como finlandeses y a nuestros ríos, flora y fauna como si fueran de Finlandia”

Finalmente y por fin este párrafo revela que reconocen que aquí hacen las cosas distinto, aquí hacen todo lo contrario que en sus países y precisamente esa es la razón por la que vienen, porque de esa manera ganan más dinero, y entonces la pregunta del millón es ¿Por qué si instalaron dos plantas ‘haciendo todo mal’ de acuerdo a lo revelado entre líneas por el expositor ahora harán una tercera donde ‘tenemos que exigirles que ahora hagan todo bien’?

Podríamos hablar de la ingenuidad del expositor, pero ya vimos que es una virtud perdida para los charrúas respecto de esta historia, entonces solo nos queda pensar que es una nueva muestra del lameculismo servil de los entregadores de la patria de Artigas.

Podríamos seguir el análisis de su discurso pero no es necesario, los que lean sus palabras pueden sacar sus conclusiones.  Solo insistiremos una vez más que las inversioness que harían no son en Uruguay, las inversiones o sea los euros los invertiran en Finlandia en pago de los equipos que traeran a una zona franca que no es Uruguay y que además en este caso no solo no invertiran en el país de los charrúas, sino que por el contrario estos less regalarán mil millones de dólares en concepto de un nuevo endeudamiento nacional para que paguen menos costos de fletes (esto solo da vergüenza ajena)

Consignamos a continuación el link de la nota de El Observador de la que estamos hablando:

Inversiones y contrapartidas

Uruguay no puede desperdiciar una inversión de miles de millones de dólares de un país de la seriedad de Finlandia

https://www.elobservador.com.uy/nota/inversiones-y-contrapartidas-201899505

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