Josep Pàmies, el agricultor que denuncia que los laboratorios combaten, llegando hasta asesinar, a quienes difunden secretos de las plantas que curan y atentan contra sus intereses corporativos. Intereses que han copado la Organización Mundial de la Salud para vender sus medicamentos en lugar de difundir soluciones gratuitas a partir de las plantas.
Josep Pàmies es un agricultor catalán descendiente de una larga tradición de payeses. De hecho, su empresa Pàmies Horticoles se dedica a la comercialización de hortalizas, verduras y hierbas ecológicas. Pero, aunque es un reconocido activista antitrasgénicos y ha sido condenado por destruir plantaciones, ese no es ni su principal negocio, ni por lo que se le conoce en todo el país.
Pàmies es un agricultor ecológico que combate activamente la nefasta industria farmacéutica
«Nosotros promovemos la autosuficiencia de las personas. Creemos que cada uno puede cultivar las plantas medicinales que necesita y debe aprender a ser el guardián de su propia salud», decía el mismo Pámies hace unos años. Esta frase resume el ideario de Josep Pàmies que difunde a través de las redes sociaqles: el del agricultor frente al complejo farmacéutico. «La gente debe ser desobediente a la imposición de los fármacos«sostiene.
Su grupo «Dulce Revolución» se dedica al cultivo y a la promoción de «plantas prohibidas» que, según explican, tienen grandes propiedades curativas. Defienden, por ejemplo, el uso de la stevia rebaudiana como un tratamiento para la diabetes entra tantas otras terapias naturales que salvarían miles de vidas a lo largo y ancho del planeta.