El Tribunal Internacional de Derechos de la Naturaleza emitió un dictamen contra el modelo forestal de Corrientes, Argentina, denunciando un “ecocidio” que afecta gravemente los derechos humanos y ambientales. Sostiene que los monocultivos intensivos de pinos y eucaliptos destruyen ecosistemas, expulsa fauna nativa y provoca un “desierto verde” que desplaza a comunidades rurales.

En el verano de 2023, más de 100 mil hectáreas fueron arrasadas por incendios, agudizando la sequía sin que las autoridades asumieran responsabilidad. La falta de regulación y la explotación laboral, incluso infantil, agravan la situación. Además, denuncian que se presenta engañosamente a estos monocultivos como bosques y soluciones climáticas.

El Tribunal insta a reconocer legalmente a los humedales y pastizales, prohibir especies invasoras y restaurar los ecosistemas. Aunque el fallo no es vinculante, establece un precedente en defensa de los derechos de la naturaleza, pidiendo un cambio hacia un modelo sostenible que respete el ambiente y los derechos humanos.

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