La indignidad de la falta de trabajo es probablemente la situación mas agraviante que puede soportar un ser humano, que por fuerza de circunstancias que no controla debe acudir a otros para proveer a si propio sustento.

La falta de ofertas laborales en Uruguay es un mal crónico que explica que un número más que significativo de quienes han nacido en la patria de Artigas deban enfrentar el martirio del exilio para intentar encontralas.

Después de más de una década el Frente Amplio, la divisa que tomó el poder en nombre de los reclamos de los sectores menos favorecidos, el tema se ha agravado: No solo no aparecen más oportunidades de trabajo local sino que vía la enajenación del territorio y los recursos propios a manos de las celulósicas que ya controlan el 10% de la superficie del país, hay cada vez menos esperanzas presentes y futuras de obtener localmente un empleo.

La apertura de un registro de aspirantes por parte de la empresa UPM2, que viene a consolidar definitivamente el modelo de exacción neocolonial instalado con la complicidad de su dirigencia pone en blanco sobre negro una vez más esta desesperante situación.

Las empresas subcontratistas que serán responsables de la construcción de la planta son básicamente extranjeras y concurren, por la especialización de las tareas, con su propio personal foráneo. Esto ya se vió desde la construcción de la planta de BOTNIA en Fray Bentos, donde los trabajadores en tareas de altura eran bolivianos y los soldadores argentinos, y solo a modo de ejemplo.

Asi que el registro que abre UPM para su nueva planta en definitiva es para los futuros operadores de la misma, básicamente no para la etapa de construcción. ¿Cuantos serán?: por lo pronto ya sabemos (no porque la empresa lo revele, porque oculta escrupulosamente esta información) que en Fray Bentos finalmente solo trabajan 220 personas. (VER NOTA) para 1.300.000 ¿? TM de producción, o sea la nueva planta que produciría según anuncios 2.000.000 de TM empleará a los sumo, haciendo una regla de tres, unos 330 trabajadores, de los cuales un porcentaje significativo serán extranjeros, por aquello que los trabajadores locales:…«no les gusta trabajar y además son muy problemáticos sindicalmente hablando», algo que no solo piensa la empresa sino que también ha sido dicho hasta por «malinche» Mujica.

Y para ese par de centernares de puestos de trabajo que ilusionan, ya van registrados 17.000 aspirantess, y solo es el comienzo de las inscripciones.

A buen entendedor le bastan pocas palabras, la defección histórica del frente político que pretendió llevar las banderas libertarias de los uruguayos se hace cada vez más evidente a los ojos de todos los orientales. Este es solo un episodio más