Desde el inicio del conflicto de las pasteras, con la instalación de BOTNIA (hoy UPM) en Fray Bentos (ROU) el EIA que dirigó el Dr. Héctor Sejenovich, anticipaba que era el primero de varios proyectos que desembarcarían en la región y que nos transformarían en una cloaca planetaria de desechos químicos empleados en la industria celulósica.
Primero fue BOTNIA (hoy UPM), luego STORA ENSO en Palmitas (ROU), luego UPM II en Tacuarembó (ROU), ahora PARACEL en Concepción (PY).
Mientras tanto la provincia de Misiones busca lograr que algún gobierno nacional le conceda una zona franca en Posadas (Mnes.) porque estas plantas de la muerte solo se instalan si los gobiernos locales les otorgan absoluta excepción impositiva, para no dejar ni las migas de las fabulosas ganancias que obtienen aquí, porque somos la región del planeta donde más rápido crecen los pinos y la segunda de eucaliptos.
…………………………
CON EL MISMO ‘VERSO’ Y
PROMESAS DE
DECENAS DE MILES DE PUESTOS
DE TRABAJO Y
PROGRESO
DESEMBARCAN EN PARAGUAY:
…………..
FUENTE: www.paraguaymipaís.com
Paraguay construye una mega planta de celulosa que será la más moderna del mundo
Hace años que Paraguay pisa cada vez más fuerte en materia de desarrollo económico y en ese sentido, para mantener el ritmo, es necesario obtener grandes inversiones como la que está impulsando el gobierno de nuestro país.
Así, cuando la Industria Nacional del Cemento de Vallemí mostraba un grave estado de obsolescencia, la planta industrial de ‘Cementos Concepción (CECON), inició -en 2019- la construcción de lo que sería una de las obras de gran relevancia asentada -también y justamente- en el mismo ámbito geográfico donde se está instalando la planta celulósica Paracel. Esta cementera comenzará a producir en septiembre de este año y actualmente emplea a 1.100 personas.
La fábrica de celulosa -ubicada en la ciudad de Concepción, sobre el río Paraguay, vía que -naturalmente- será vital para transportar el producto final hasta los barcos que atraviesan el Atlántico y el Pacífico para llevar la pasta celulósica a China y Europa, destinos principales de su producción y, a tal efecto, la empresa tiene en la mira al Puerto Palmira (Uruguay) para exportarla.
Geográficamente, está a 211 kilómetros en línea recta de Asunción y cuando termine el proceso de instalación y puesta en marcha, será la mayor inversión privada en la historia del país y la más moderna del mundo e implicará para la región un fuerte impacto económico, social y productivo.
La planta empleará a 4000 personas en forma directa y se estima un impacto de 35 mil empleos en forma indirecta será autosuficiente en la generación de energía a partir de biomasa (1), con una capacidad de 220 MWh (megavatio hora), y un excedente de 100 MWh, para exportar.
La obra de construcción del emprendimiento, se inició en el segundo semestre de 2021 y estiman su puesta en marcha al 2023, actividad liderada por el Grupo Zapag de Paraguay y Girindus Investments de Suecia, quienes invertirán más de US $ 3.200 millones. La combinación de ambos grupos llevó a la creación de Paracel (Paraguay Celulosa), empresa constituida el 12 de noviembre de 2018, es la encargada de llevar adelante el proyecto.
(Aclaremos que el Grupo Zapag es dueño de Copetrol, la principal distribuidora de combustible nuestro país con una red de 360 estaciones de servicio y que también tiene una importante flota de barcazas para traer el combustible desde el río de la Plata).
Como inversión privada, es la más importante, el negocio de mayor envergadura que se hizo en Paraguay. La represa de Itaipú fue más grande, pero no fue privado. Esto no tiene precedentes en nuestro país.
La fábrica producirá 1,5 millones toneladas por año de celulosa BHKP (de eucaliptos) para lo cual la empresa forestará –en tierra propia-cerca de 135 mil hectáreas de esos árboles, de las cuales, las primeras 20 mil ya se están haciendo. Como la especie tarda entre seis y siete años en crecer, en un principio la fábrica operará con madera suministrada por terceros en Brasil y Argentina.
La idea es que la planta esté produciendo en 2023, sacando pasta celulosa para fabricar todo tipo de envases de papel y cartón. Cuando un delivery entrega una caja de hamburguesas o sushi en París, un español se compra el último Iphone en Madrid, o un chino se lleva su compra en un supermercado en bolsas de papel, ahí estará la celulosa salida de Concepción.
- AUTORIDADES INTERVINIENTES PARA APROBAR SU INSTALACIÓN El desarrollo del proyecto de la Planta de Celulosa Sustentable y Plantación Forestal impulsado por la empresa Paracel, fue aprobado en marzo del 2021 por el Consejo Nacional de Zonas Francas, organismo autónomo encargado de elaborar, proponer y ejecutar políticas y disposiciones referentes a la regulación, operación y control de Zonas Francas. Está integrado por el Ministerio de Hacienda (MH), el Ministerio de Industria y Comercio (MIC), el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), conjuntamente con el sector privado.
- Posteriormente, el 2 de junio del mismo año, el Poder Ejecutivo Nacional, a través del Decreto N° 5389, aprobó la concesión y explotación de una Zona Franca (2) a favor de la empresa Paracel SA en el departamento de Concepción.
DATOS CONEXOS
- (1) Biomasa: aquella materia orgánica, de origen vegetal o animal que, mediante la biorrefinería, puede ser utilizada como fuente de energía
- (2) Zona franca: es un territorio delimitado de un país caracterizado por contar con una serie beneficios tributarios, tales como exención de pago de derechos de importación y exoneraciones de algunos impuestos, un modo que tienen los países para atraer inversiones con el fin de promover el desarrollo económico y social de la región. Primordialmente, el objetivo buscado es potenciar el establecimiento de industrias, reducir las tasas de desempleo, fomentar el uso de tecnologías y recursos humanos calificados que permitan incrementar la productividad del conjunto de la economía.
TODAS LAS PLANTAS DE PAPEL, CONTAMINAN EL MEDIO AMBIENTE
Y la que se está instalando en Concepción no es la excepción: también puede provocar un perjuicio ambiental que, por cierto, no resulta inocuo, ya que las fibras vegetales para su fabricación, se someten a varios tratamientos en los que interviene principalmente el agua —desintegrando la materia prima, transportando las fibras y formando el papel—, y que consumen una cantidad muy importante de recursos (sobre todo de agua y de energía, pero también de productos químicos y de materia prima). Su incidencia radica en el proceso elegido para llevarlo a cabo, y los recaudos que se arbitren para hacerlos menos pernicioso y más sustentable.
Para reducir el impacto ambiental de la fabricación del papel, existen tecnologías más limpias que las utilizadas mayoritariamente para producirlo
A tal efecto, el Ministerio del Ambiente y Desarrollo Sostenible de Paraguay (MADES), ha realizado el estudio para la identificación y evaluación de los impactos ambientales cualitativos y cuantitativos, incluido los alojamientos temporarios, vigilancia, sistema de primeros auxilios, habitaciones, baños, cafeterías, área de ocio, suministro electricidad, de agua potable, sistema de recolección de residuos, tratamiento y disposición de efluentes sanitarios y sistema contra incendios etc. dándole curso el 17 de febrero de 2021
Además, ha tenido en cuenta el certificado FSC, (Forest Stewardship Council, Consejo de Administración Forestal en español) sistema de certificación forestal creado en California que asegura las buenas prácticas de gestión de empresas consumidoras y comercializadoras de madera y sus derivados en la aplicación del proceso. Paracel obtuvo esa licencia ambiental en la que consta que respeta el medio ambiente, condición ‘sine qua non’ para que, además, sus productos sean aceptados en los mercados con los que debe operar.
(MUY IMPORTANTE: el resultado de todos los recaudos mencionados más arriba, solo se podrá verificar con el correr de los años, cuando la fábrica esté en marcha y produciendo con su máxima capacidad).