El Ministro de Relaciones Exteriores del actual gobierno, Felipe Carlos Solá, ha sido siempre un tipo arrebatado, de los que atropellan primero y preguntan después, y este es un modo de gestión complicado porque cuando se toman decisiones equivocadas a este nivel, de las consecuencias nos enteramos tarde y las pagamos todos. Como cuando autorizó en tiempo record y sin respaldo científico el uso del glifosato, en ese entonces, 1996, tomó una decisión inconsulta de terribles consecuencias en la salud de las personas y la naturaleza en general.
Ahora, nuevamente, fiel a su estilo patrón de estancia, que le gusta sobreactuar, declaró respecto de los ‘chanchos chinos’ que el negocio ya estaba hecho, que nadie se metiera a opinar (SIC). Dejando de paso pintados a los Ministros de Economía, Agricultura, Salud y Ambiente que son quienes tendrían que estudiar y decidir en esta historia.
LOS CHINOS NUNCA SE RASCARON PARA AFUERA
En la aldea global nadie regala nada a nadie y si hay alguien cuidadoso en las defensa a ultranza de sus intereses son los chinos, nosotros en cambio estamos llenos de cipayos (Jauretche dixit) a los que les encanta vendernos por treinta denarios. Si no vean lo que está haciendo Bordet con los rollizos de pino y eucaliptus que exporta sin industrializar, cerrando aserraderos y reelaboradoras locales para crear trabajo en Asia, delito de lesa economía que comete habiendo derogado una ley que prometió respetar. Llevándose troncos pagan un enorme falso flete, porque los rollizos les rinden menos de unos 50% en piezas aserradas. Pero a ellos no les importa, como debe ser, porque crean fuentes de trabajo y riqueza locales, todo lo contrario que hace el actual gobierno entrerriano.
Por supuesto que estamos de acuerdo con agregar valor a nuestros commodities agropecuarios, es mucho mejor exportar carne de cerdo que enviarles soja y maíz para que la produzcan allá. Pero las formas de producirla no nos debe ser indiferente, porque lo que ocurre es que los mega criaderos de cerdos en China han resultado en catástrofes económico sanitarias que ellos se quieren sacar de encima y aparentemente, porque no hay información oficial sobre el tema, ese es el modelo que nos quieren imponer, no porque sean malos, sino simplemente porque de esa manera sus costos sería menores y además se podrían llevar también el lucro empresario de la crianza, al ser grandes inversores chinos quienes pondrían los 25 gigantescos establecimientos de 1.200 madres cada uno, que es una cifra que se maneja off the records.
EN CHINA LOS MEGA-CRIADEROS HAN CREADO MEGA-PROBLEMAS ¿Y AQUÍ…?
En 2018 estalló en China una peste que ocasionó la muerte, y/o sacrificio, de la friolera de entre 150 a 200 millones de cerdos, los chinos nunca dan información precisa sobre sus problemas, (para muestra basta lo ocurrido con el Covid-19). Para darnos una idea de la magnitud del desastre en nuestro país el stock total de cerdos es actualmente de 3 millones cuatrocientas mil cabezas.
El problema surgió en estos mega criaderos que por su magnitud y hacinamiento, magnifican la posibilidad de generar pandemias, la peste mencionada desató una epidemia de Gripe Porcina Africana, una enfermedad mortal para el animal, muy contagiosa y sin cura. Y que además podría mutar y transmitirse a los seres humanos. Cualquier parecido con la realidad, no es casualidad.
A raíz de esto, los chinos decidieron ir achicando sus plantas de producción de cerdos recuperando los sistemas cooperativos y de pequeños productores integrados que habían sido abandonados por la entrada de grandes actores financieros al negocio. Y de paso sacarse de encima los enormes problemas ambientales del manejo de los millones de kilogramos de detritus cloacales generados en estas plantas.
Pero no abandonaron la tentación de obtener los menores costos posibles que se logran con las mega plantas productivas y entonces la solución que aparentemente encontraron fue directamente tirarnos a nosotros el problema. Y Felipito, siempre ávido de efectismos políticos, mordió el anzuelo y se lanzó a presentar la historia como un éxito personal, no sea que alguien le quiera arrebatar el mérito, aunque el costo, una vez más podría caer sobre nosotros.
EXISTE UNA FORMA DE HACER CORRECTAMENTE EL NEGOCIO
Y no se trata de ser originales, solo de capitalizar la experiencia ajena y saldarla en nuestro beneficio, por eso hacemos nuestra la declaración de la FONAF – Federación de Organizaciones Nucleadas de la Agricultura Familiar- que en referencia a este tema, días pasados manifestó lo siguiente:
…” Con respecto a los pequeños y medianos productores y las pymes agroindustriales del sector y las que potencialmente podrían formarse, la acción del gobierno nacional y los gobiernos provinciales tendría que ser la de promover la producción integral de carne de cerdo y derivados, facilitarles la inversión, con créditos de la banca pública y cooperativa con líneas especiales para infraestructura y tecnología, promoviendo el desarrollo local armónico en el territorio, evitando la concentración y la deslocalización productiva que tenemos actualmente donde gran parte del interior argentino compra alimentos de la pampa húmeda proveniente de grandes empresas y postergando el desarrollo local.
Necesitamos un debate constructivo y superador Los pequeños productores tenemos una visión estratégica de una argentina productiva e inclusiva. Creemos en la participación protagónica de Estado Nacional y Provinciales en este tipo de emprendimientos, para garantizar los derechos de los productores y consumidores. Aspiramos a que se concrete un proyecto que resulte de verdadero beneficio para el sector las economías regionales, el trabajo argentino, la innovación tecnológica, el cuidado del medioambiente y el bienestar animal Tenemos la expectativa de que se cumplan con todos estos anhelos y no solo con algunos, porque tenemos una visión de la integralidad del desarrollo. Este proyecto necesita un debate. Ello permitirá enriquecerlo y re direccionarlo si hiciera falta”.