URUGUAY: EXPORTACIONES DEJAN A ASERRADEROS LOCALES SIN MADERA

URUGUAY: EXPORTACIONES DEJAN A ASERRADEROS LOCALES SIN MADERA[1]

 El 52% (225 sobre un total de 435) de los aserraderos uruguayos ya están inactivos

 La falta de madera en el mercado local para los aserraderos y empresas pequeñas pone en riesgo cientos de empleos de mano de obra calificada, informó Instituto Uruguay XXI.

La razón de esa escasez es el aumento de las exportaciones de rollos que antes estaban destinados al mercado interno.

Las políticas comerciales de las casas matrices de las fábricas de pasta de celulosa establecidas en Uruguay determinaron que la prioridad que éstas otorgan a la exportación de commodities en detrimento de productos elaborados provoquen el desabastecimiento de las industrias manufactureras locales

La situación planteada es mirada con indiferente impotencia por el gobierno de la República Oriental del Uruguay, quién en años recientes resignó cualquier forma de control y supervisión de este recurso a manos de las empresas extranjeras que se instalaron allí.

Pedro Soust, director nacional Forestal del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca del Frente Amplio comentó que la falta de rolos grandes se debe “a un tema de oferta y demanda donde a los productores les conviene vender fuera del país”. Confirmando el desinterés y desentendimiento del gobierno de Mujica por los miles de puestos de trabajo que se están perdiendo en la industria local

Actualmente la falta de materia prima afecta a empresas y aserraderos medianos y pequeños que operan en el interior del país.

Uruguay cuenta en la actualidad con 434 establecimientos con capacidad de aserrío, de los que 209 permanecen en actividad, aunque muchos de ellos estan considerando paralizar sus actividades en el corto plazo, según un informe del mismo gobierno uruguayo.

NÚMEROS QUE HABLAN POR SI SOLOS

Los números que indican el empleo del sector forestal son contundentes: sobre un total de 21.000 personas que trabajan en las actividades silvícolas y foresto industriales apenas 390 trabajan en la industria de la celulosa, o sea que estas empresas ocupan solo el 2 % de la mano de obra generada por el sector, confirmando la falacia de que este tipo de industrias generan empleo, porque todos los empleos no son generados por las plantas celulósicas sino por la presencia de las plantaciones industriales que de no existir aquellas igual serían aprovechadas, generando actividades silvícolas, transporte etc., etc., incluso si los 225 aserraderos paralizados estuvieran en producción estarían generando unos 4.500 empleos directos (recuerden la i. celulosica 390) y tambien estarían tributando todos los impuestos de los que son exonerados las multinacionales del sector.

Esta confirmación adquiere un carácter de denuncia por un hecho que revela en forma irrefutable la cualidad de exacción neocolonial que están haciendo estas empresas:

El sector forestal representa el 13% de la actividad económica local, pero no puede ser considerado un sector productivo nacional porque está exento de toda clase de impuestos y gabelas.

Por mencionar solo algunos:

– Las rentas derivadas de su explotación no se computan a efectos del IRAE (impuesto anual que grava las rentas empresariales – Impuesto a la Renta de las Actividades económicas-.

-Sus respectivos valores o extensiones no se computarán para la determinación del monto imponible del Impuesto al Patrimonio.

Exoneración a la contribución inmobiliaria rural impuesto municipal a la propiedad de la tierra.

Además, como las exportaciones de pasta de celulosa se hacen desde zonas francas, como han sido aceptados los emplazamientos de estas industrias, tampoco pagan impuestos al valor agregado, a las ventas ni tasas municipales de ninguna índole.

 

[1] Fuente: Informe Uruguay XXI –

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un comentario

  1. Gracias por el informe, es definitivo para terminar con los mitos y las mentiras de las plantas de celulosa.

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