A los laboratorios no les interesa curar enfermedades sino fidelizar clientes crónicos para que consuman de por vida los químicos que producen.
El poder de la industria química controla gobiernos y sistemas médicos haciendolos cómplices de sus criminales estrategias comerciales
Este documental que ilustra el caso del H.I.V.
Vale la pena verlo
La mentira del SIDA y el negocio del pánico